miércoles, 13 de abril de 2011

Barroco en America

El Barroco americano
El arte americano presenta características originales a causa de las influencias de los modelos peninsulares y del arte precolombino. En América, el Barroco se desarrolló desde mediados del siglo XVII hasta los comienzos del siglo XIX.
Las características del arte barroco en América
Las obras artísticas realizadas en las colonias americanas presentan algunas características propias que las diferencian de las hechas en Europa. Esta situación se debió a la distancia existente entre las metrópolis y las colonias y a la ausencia en América de grandes artistas europeos. Fue decisiva la presencia de una tradición artística precolombina que influyó en la creación de un estilo particular. Objetos llegados del Asia sirvieron también como fuentes de inspiración, en especial, en el arte desarrollado en las colonias portuguesas y en la zona de la costa del Pacífico.
Los rasgos básicos del estilo barroco se transmitieron a América fundamentalmente por medio de la enseñanza de los religiosos, que utilizaban libros o estampas que contenían obras realiza-das por artistas europeos.
Asimismo, la presencia de artistas europeos, criollos, indígenas y mestizos contribuyó a crear un lenguaje plástico propio de cada una de las grandes regiones americanas.
Una de las principales características del Barroco americano es la importancia que adquirió la arquitectura con respecto a las otras artes. Esta propuesta se debe a la necesidad de crear iglesias para recibir a las poblaciones recientemente cristianizadas. Otra característica importante es la rica decoración de las fachadas y los interiores de los edificios.
Imágenes del Barroco en America
Durante los siglos XVII y XVIII existieron en América diversos centros artísticos.
En el Virreinato de Nueva España, la arquitectura colonial se destaca por el empleo de diferentes materiales de colores intensos, usados de diverso modo en las diferentes partes de México.
Las torres de los edificios religiosos suelen presentar una gran decoración en sus columnas, comisas y tallas en la parte superior.
En el interior de estos templos suele desarrollarse una exuberante ornamentación, realizada con yeserías y estucos y pintada con vibrantes colores. Los retablos, las imágenes talladas y de vestir y las pinturas transforman a la iglesia en un lugar maravilloso, donde el fiel ora y medita.
El Virreinato del Perú se caracterizó por las diferentes soluciones que cada región dio a los problemas arquitectónicos. Mientras que en Lima, la capital, se realizo una arquitectura más sobria, en ciertas zonas (Cajamarca, Arequipa, El Callao) se desarrollaron más los elementos decorativos. Una característica general de la arquitectura del Virreinato del Perú es su escaso colorido, a diferencia de la del Virreinato de Nueva España.
Iglesia de ¡a Virgen de Ocotlan, en Tlaxcala, México. Siglo XVIII.
En la fachada de esta iglesia se observa el uso de la chiluca, una piedra de color blanquecino, y del tezontle, de color rojizo. Con la primera se recubrió la zona superior y la portada; con la segunda, la parte baja de las torres.

En el Río de la Plata existieron diferentes regiones estilísticas: Buenos Aires y la región pampeana; la Mesopotamia, donde se hallaban las misiones guaraníes; Córdoba y el centro del territorio de la actual Argentina; el noroeste de la actual Argentina, estrechamente vinculado con el Alto Perú (actual Bolivia).
En la actual provincia de Córdoba, los jesuitas fundaron estancias para cultivos y cría de ganado con el objeto de mantener el Colegio que habían establecido en la ciudad de Córdoba. Las estancias eran centros de producción, a diferencia de las misiones que eran lugares de evangelización.

ECUADOR

Arte barroco en Quito
Es el orgullo de los ecuatorianos y es objeto de admiración internacional. Quito fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Aparte de sus bellísimos paisajes, rodeados de montes y varias montañas, algunas nevadas, Quito es conocido por sus tesoros en lo que se refiere a iglesias coloniales, pinturas, esculturas y labrados. El período colonial hispánico se extendió desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII. La gran destreza ecuatoriana combinó el estilo de Renacimiento y Barroco europeos con las influencias indígenas y mestizas. Los conquistadores españoles prácticamente iniciaron la construcción de iglesias y conventos apenas llegados al Nuevo Mundo, cuando la iglesia católica era el centro de instrucción religiosa y promoción del arte. Como parte de la “aculturación” de los indígenas americanos, los españoles establecieron escuelas de pintura y escultura donde artistas españoles entrenaban y enseñaban el oficio de las artes a la población indígena. Como resultado, la Escuela Quiteña se tornó famosa y reconocida en Latinoamérica por sus talentosos artistas, que incluían nombres como Bernardo de Legarda y los indígenas Caspicara y Pampite. Miguel de Santiago, Javier de Goribar, Manuel Samaniego y el Padre Bedón también sobresalieron en esta escuela de arte. Sus contribuciones al arte colonial son consideradas por eruditos como unas de las más valiosas de América.

Arquitectura Barroca en Quito
Los ejemplos mas claros de al presencia del arte barroco en la arquitectura de Quito son las iglesias

Iglesia de la Compañía


La Compañía de Jesús, conocida simplemente como "La Compañía" entre los quiteños, es una iglesia católica de estilo barroco situada en el centro histórico de la ciudad de Quito, en Ecuador. Es una de las obras más significativas de estilo barroco en la arquitectura Sudamericana. Además fue la sede de la orden jesuita en este país y también albergó en el pasado un colegio.

La construcción de la iglesia con el patrocinio de la orden de la Compañía de Jesús inició en el año de 1605 bajo las órdenes del sacerdote Nicolás Durán Mastrilli, y concluyó en 1765. Como resultado la edificación de esta obra arquitectónica duró 160 años. En 1634, el jesuita Gil de Madrigal realizó el crucero pero las obras cobraron impulso con la llegada del hermano Marcos Guerra en 1636, quien era arquitecto y escultor.

Iglesia de San Francisco



Esta iglesia fue construida luego de la conquista española y se dice que fue la que dio su nombre a la Capital de Ecuador: San Francisco de Quito. El atrio que se extiende de lado y lado de la iglesia presenta una abertura en el medio, desde donde discurre una escalinata hacia la parte central de la Plaza de San Francisco. La fachada tiene un estilo similar al del Escorial en España. El interior de la iglesia es de estilo Barroco. El techo del cofre en el corredor que lleva a la sala central de la iglesia tiene un estilo morisco muy rico con pinturas de Miguel de Santiago. Es interesante observar entre los detalles de la decoración imágenes del Dios Sol, la divinidad Inca. El Altar Mayor contiene la obra maestra original de Legarda: "La Virgen de Quito". Esta escultura es la única imagen alada de la virgen María en arte colonial.


Arte barroco en Cuenca
Cuenca es la tercera ciudad más importante de la nación. También es considerada como la ciudad más atractiva del Ecuador, por propios y extraños, por mantener la tranquilidad y hermosura de una ciudad antigua.. En el centro de la ciudad se ubican importantes vestigios históricos: museos e iglesias antiguas, calles adoquinadas y casas con fachadas que hacen notar las diferentes influencias europeas con nobles balcones y cielorrasos tallados artísticamente.
En la arquitectura barroca de Cuenca, encontramos varias obras, muchas de ellas son templos y lugares frecuentados por la gente:

ARQUITECTURA BARROCA Catedral nueva de Cuenca o de la Inmaculada Concepción. La construcción de esta catedral comenzó en el año de 1880, y debido a sus dimensiones es considerada una de las más grandes de Sudamérica. La catedral está hecha de alabastro y mármol. Sus pisos están cubiertos de mármol rosa importado en su tiempo desde Carrara, Italia. Los estilos Romanico y Barroco estan presentes en su arquitectura. En ella destacan sus cúpulas y destellan con una vision espectacular, al tener una elevación de hasta 50 metros.


Detalles de la parte interior de la Catedral nueva, en los cuales podemos apreciar y valorar todo lo precioso y la majestuosidad que se encuentra dentro de ella.


Detalles de la parte exterior de la Catedral Nueva, en donde podemos observar toda su hermosa arquitectura y los detalles que tiene colocados en sus umbrales, puertas, pilares, etc.En el centro historico de Cuenca, se puede apreciar toda la belleza que tiene por decoracion y adornos sus casas y muchos lugares mas.

Pintura Barroca de Cuenca

Uno de los lugares historicos de Cuenca, que en la actualidad esta ocupado por varias oficinas, en el pasado pertenecio a una de las familias de alcurnia de Cuenca, este lugar es conocido por la mayoria de gente por el nombre de "La casa de las palomas", aqui podemos apreciar unas bellas pinturas.
  



Exponentes de la Escultura Barroca

Quirio Cataño y Juan de Chávez, en Quito

MÉXICO
Arte barroco 

En México, la mano de obra indígena transmitió ciertos caracteres que recuerdan los de las artes prehispánicas. En el siglo XVII, nació el estilo colonial, interpretación americana del Barroco, este produjo una fabulosa cantidad de monumentos; el aporte indígena cobro jerarquía propia y gradualmente los indios se adentraron en las creaciones arquitectónicas, primero como ayudantes de sus maestros y luego crearon ellos mismos obras arquitectónicas resolviendo los problemas de forma y color. Las ciudades mejicanas se poblaron con las muestras extraordinarias de este movimiento como catedrales, templos, palacios, capillas, ayuntamientos casonas.
Lo Barroco se encuentra en la decoración de la catedral de México, con retablos de gran belleza; en la iglesia de la Santísima Trinidad, que fue construida por Lorenzo Rodríguez entre 1755 y 1786; en la catedral de Panamá; en la Iglesia de la Compañía, en el Cuzco.
4. Durante los siglos XVI y XVII, fundar una cuidad, para los españoles, era al mismo tiempo erigir un templo y fundar una escuela, por eso si bien la educación no era muy buena, nunca faltaron ni maestros ni textos de estudios en las colonias españolas para educar a los niños y a las niñas.
El obispo de Tucumán, José Antonio de San Alberto, quería fundar escuelas en todos los cuartos y colegios en todas las ciudades; pensaba que los curas debían tener disposición para la enseñanza. Pero no quería escuelas para formar beatos sino que deseaba hacer de los educandos laboradores diestros; era la suya una escuela preparatoria para la vida practica.
En Córdoba se fundo en 1610 un Colegio máximo solo para jesuitas, pero en 1653 se convirtió el colegio en una universidad con las puertas abiertas a todos los que quisieran graduarse. Contaba con las facultades de arte y teología, física, metafísica y lógica. En 1687, Tomas Felix de Aragoña fundo el colegio Nuestra señora de Monserrat, mientras fue gobernador de Córdoba. El gobernador intendente marques de Sobremonte fomento la enseñanza primaria, que fundo esculcas en los curatos de su jurisdicción conforme a sus instrucciones de 1791 y obligo a los padre a contribuir al pago de los maestros y a enviar a sus hijos a las escuelas.
En su visita a Catamarca en 1783, San Alberto recibió de unas damas el ofrecimiento de crear de su peculio una casa de huérfanas, así se levantó en aquella ciudad una institución para la enseñanza de las niñas.
En San Luis, después de la expulsión de los jesuitas la enseñanza continuo en manos de clérigos seculares.
La institución máxima en la enseñanza en la ciudad de Buenos Aires fue el colegio San Carlos de Buenos Aires. En 1772 se fundaron los reales estudios, siguiendo un plan que abarcaba la creación de la universidad de Buenos Aires, un colegio convictorio y un seminario. Pero la universidad no llego a construirse. En 1787 el doctor Monteo presento un plan de estudios donde se imponían toda clase de castigos como azotes y el uso de las fuerzas públicas. El virrey aprobó la ley pero excluyo los castigos físicos. En 1792 se fundo el Colegio San Carlos, que se parecía por su plan de estudios y métodos a la universidad de Oxford.
En 1800 el rey decidió fundar la Real Universidad de San Carlos y de Nuestra Señora de Monserrat, quedando los religiosos separados de su dirección y gestión.
En 1801 se crearon los censores regios para vigilar que en las universidades no se enseñasen doctrinas contrarias a la autoridad y a la religión de la corona.
5. El Comercio entre América y España estaba dificultado por los piratas, Filibusteros y Corsarios que trabajaban para beneficio propio o para la corona de otros reinos como Inglaterra. Las dificultades llegaron a tal extremo que todo buque español que se aventuraba a atravesar el mar en uno u otro sentido podía estar seguro de tener que enfrentar bandas de saqueadores de Inglaterra, Francia, Holanda y otros marinos del mundo. Si escapaba de unos, había de caer en manos de otros y esto significaba la muerte de toda la tripulación y por supuesto la perdida de la carga.
Esta situación obligo al gobierno español a orzar dos flotas de guerra, que cada seis meses salía de Cádiz dando convoy a todos los barcos de comercio que llevaban mercadería a América y a los que iban a retornar de allí con valores y frutos coloniales.
Las dos flotas marchaban juntas hasta la isla de Santo Domingo. Una se llamaba Flota de Tierra Firme y la otra Flota de la Nueva España. La de tierra firme desembarcaba en Portobelo, costa de Panamá, todo el surtido del Perú. Este surtido pasaba de allí al Callao, del Callao al Altoperu, y entraba mas tarde en la Provincia del Tucumán. De allí se llevaba a Córdoba y luego a Buenos Aires.
A simple vista se comprende cual era la situación de las miserables provincias sujetas a este trafico tan absurdo, como Buenos Aires, que no podía surtirse sino con lo que le llegaba vía Córdoba, y para esto tenia que esperar mucho los artículos necesarios para la vida que no podían obtener de su medio natural, además pagando la transportación de los bultos, impuestos, fletes, comisiones, etc. Por otro lado, aunque las mercancías hubieran llegado, Buenos Aires no tenia con que retornarlos, ya que nuestro país no era un país minero y no se podían enviar a Paraná cruceros de lana, trigo o charque, que eran los únicos artículos que se podría haber mantenido el intercambio.
Por otro lado, el Perú necesitaba negros esclavos para la agricultura tropical y para mil tareas, sin tener otro puerto por donde recibirlos que el Río de la Plata, porque siendo esta una mercancía muy cara, por su cuidado, por su cargamento y por su alimentación, era indispensable que viaje sea directamente a Buenos Aires, porque no podía hacerse por el Cabo de Hornos.
Los capitanes de los barcos que comercializaban esclavos, introducían mercadería de contrabando cuando llegaban al puerto de Buenos Aires a un costo mucho menor que el que el costo que implicaba el comercio de las dos flotas por el Istmo. Comenzó así a comprenderse la importancia del puerto de Buenos Aires para el comercio con España, y surgió una divergencia entre quienes querían habilitarlo y quienes se oponían debido a los intereses del monopolio comercial que se daba en aquella época.

Peru

Arte Barroco
Durante  los  siglos XVII  y XVIII los  países  iberoamericanos  y  el  Perú  en  particular conocieron el esplendor de un arte que había llegado desde los primeros momentos de la  conquista  y  que  alcanzó  entonces  títulos  propios  e  indiscutibles:  el  barroco. El barroco, más que un estilo artístico, se  convirtió  en la expresión  de  un  modo de vida. Una   visión   del  mundo   y  la   manifestación  de una civilización en sus más diversas gamas: arquitectura,   pintura,   escultura,   literatura  y, por cierto, la música. El barroco impregnó   la   vida   cotidiana  de   los   hombres   del   Virreinato  del  Perú, marcó sus sentimientos y al mismo tiempo los modos de expresarlos.

Tal   vez,   en   ningún   otro   momento   de   la   historia   de Iberoamérica   exista  una reinterpretación tan vigorosa de técnicas y  valores provenientes de Europa, compartida por   todos   los   pueblos   del   continente.   Tuvo   lugar   una   síntesis   con  formas y manifestaciones   aborígenes, así   como maneras y   estilos regionales peculiares y de notable originalidad.

El   barroco    persiste   en   el    presente   como    trasfondo  de   la   cultura   viva,   en manifestaciones    tradicionales   y   populares cuyo origen, justamente, se remonta a la época   del  virreinato. Estas manifestaciones son  un testimonio del aporte de la Iglesia
Católica a la formación cultural del Perú y a la definición de su identidad.

Ante el imperativo de investigar, recuperar, preservar y difundir el patrimonio constituido por la música  barroca   existente    en los repositorios eclesiásticos peruanos, así como las  expresiones   de  la   cultura viva que se   remontan en sus orígenes a los siglos del virreinato,  se decidió  crear e impulsar  el Proyecto  Laudate (alabar mientras se canta) que luego se ha perfeccionado como  Perú Barroco,  pasando  la   propuesta  de la sola investigación  a  la   difusión   real  en  los  ámbitos  nacional e internacional. La música occidental, en su continua evolución, ha ido recibiendo influencias de diferentes   partes del mundo y continúa en este proceso hoy en día.

Hanacpachap  ha   diseñado Perú Barroco para promover un mayor conocimiento de la evolución de la música occidental   luego del descubrimiento de un ‘eslabón perdido’ en su desarrollo en el Perú.

Arquitectura
Barroco. Siglo XVII
Fue el mejor vehículo para las expresiones mestizas. Se  caracterizó entre otras  cosas por la recargada ornamentación de las  fachadas en las que se reproducían emblemas, plantas, animales y figuras humanas.  La columna salomónica de trazos serpentiformes fue un  elemento   fundamental.  Entre 1660 y 1725 el barroco peruano adopta un estilo muy   español   denominado   Churrigueresco,   por   su creador   el   arquitecto José de Churriguera,   éste   presentó   un   estilo   de   barroco   exacerbado  El barroco llegó al Perú  con  el  virrey  Conde  de  Lemos.  Ejemplos: La iglesia de la Merced, la iglesia de San Agustín, en Lima, iglesia de la Compañía en Arequipa.
En   el  Perú  la arquitectura se entremezcla el empleo de la columna salomónica con el de la hojarasca decorativa indígena.



 El barroco en el virreinato del Perú está marcado por el terremoto de Lima de  1746. La ciudad quedó totalmente destruida y de  su reconstrucción  surgieron   los edificios más representativos   del barroco.  Francisco Antonio Guerrero y Torres trabajó, también, en  este virreinato: catedrales de Lima,   Cuzco y    Quito.     También trabaja en Lima el portugués   Constantino  de  Vasconcellos:  convento   de   San Francisco.   Este   es   el monumento arquetípico de la arquitectura limeña.  José de la Sida: convento de San Agustín


Colombia

Colonización

El actual territorio de Colombia, como parte de Las Indias no fue considerada como colonia por la administración española, sino como reino (o parte de reinos), gobernado(s) directamente por el monarca, ya que la Corona era la dueña sobre las tierras y mares que se descubrieren y conquistaren, de acuerdo a las Capitulaciones. Por Real Cédula de 1500 se prohibió esclavizar a los indios. Luego las Leyes de Burgos 1512 establecen la Encomienda, para incorporar a los nativos a la civilización europea y evitar la extinción de la población, pero los encomenderos no acatan y desobedecen los mandatos reales, por ello los funcionarios reales solicitan su abolición. Luego se estableció la Mita, que obliga al natural a trabajar tanto al gobernador como al funcionario, ello conduce a una alta mortalidad indígena en el siglo XVI, y la necesidad de la colonización.
Arte Barroco
Arquitectura
La estética básica con que se crean es la del barroco, la que muestra el poder de España. Pero en Colombia el barroco encuentra su propio estilo, gracias a la fusión del nuevo estilo con el sustrato indígena y la tradición mudéjar. Tres son los impulsores del barroco en América: la Corona, la burguesía y los jesuitas como representantes de la Iglesia. La arquitectura también fue un vehículo para la evangelización. En Colombia destaca Simón Schenherr , un jesuita de origen alemán: iglesia de los jesuitas de Cartagena de Indias y Popopayán
San Francisco. Según el arquitecto, crítico e historiador Germán Téllez, la fachada de este templo constituye la mejor muestra del barroco en toda Colombia. Su construcción fue comisionada por las familias Valencia y Arroyo. En la torre se encuentra la famosa campana donada por don Pedro Agustín de Valencia. Este templo es notable por el decorado de sus altares y la proporción de sus naves y ábside. En la plazoleta, objeto de una profunda y polémica transformación en el año 2004, se yergue el monumento al prócer payanés Camilo Torres, cuya réplica se encuentra ubicada en la plazoleta del Colegio Mayor de San Bartolomé en Bogotá.

Santo Domingo. Obra tardía del barroco neogranadino, diseñada por el arquitecto español Antonio García por encargo de la familia Arboleda. Posee excelentes muestras de aquitectura, orfebrería y mobiliario de las escuelas quiteña y española. Su púlpito fue diseñado en la primera mitad del siglo XIX por un ilustre hijo de la ciudad, el Sabio Francisco José de Caldas.

Iglesia y convento de San Agustín. Fray Jerónimo Escobar funda el convento de los Agustinos a finales del siglo XVII, cuyo templo fue destruido con el terremoto de 1736. Reconstruido a partir de aportes de personas notables de la ciudad, fue necesario restaurarlo nuevamente a raíz del terremoto de 1983. De manera especial se destaca su altar mayor tallado en madera y cubierto en pan de oro, su expositorio barroco en plata y la bella imagen de la Virgen de los Dolores.

La Ermita. Es la iglesia más antigua de la ciudad y en algunas ocasiones sirvió como Catedral Pro Témpore. Data de 1546 y contiene un fino altar y frescos que fueron descubiertos después del terremoto de 1983.
Catedral Basílica de Nuestra Señora de la Asunción. En sus orígenes fue un rancho pajizo. En 1609 se inauguró una segunda catedral de tapial y mampostería. La actual fue consagrada en 1906 por el arzobispo Manuel Antonio Arboleda, quien la dotó de un magnífico órgano de tubos europeo. Su estilo es neoclásico, y gran parte de la construcción fue restaurada a raíz del terremoto de 1983, incluida la gran cúpula de 40 metros de altura, en cuya restauración se siguieron los lineamientos de la estructura original diseñada por el artista payanés Adolfo Dueñas.

El Carmen. Su construcción se inició en 1730, al tiempo con el monasterio de las Carmelitas, y se terminó después del terremoto de 1736, a expensas de doña Dionisia Pérez Manrique, Marquesa de San Miguel de la Vega. Fue proyectado y construido por el maestro santafereño Gregorio Causí. La obra es sencilla en su estructura cuadrangular con elementos de intención mudéjar, pero los retablos platerescos de los altares, tallados por maestros payaneses, son esplendorosos. Las hermanas Carmelitas abandonaron el monasterio en 1863 por haber sido confiscado por el gobierno, y la diócesis asumió la administración del templo.
La Encarnación. Las monjas de la Encarnación fundaron en Popayán el primer colegio femenino de lo que hoy es Colombia. El templo actual data de 1764 y fue comisionado por la abadesa de turno, la madre Mariana de San Etanislao y Saa. Es el templo con el más hermoso tesoro de retablos barrocos forrados en pan de oro que posee la ciudad.
San José. Conocido también como Templo de la Compañía de Jesús, fue construido en 1702 en consonancia con los lineamientos arquitectónicos de los jesuitas durante el barroco en América. Ha sufrido algunas transformaciones, la más reciente de ellas en 1983, en que se dejó a la vista buena parte de la fachada en ladrillo, que había estado cubierta con pintura y cal durante al menos dos siglos.